Del otro lado del charco // Auf der anderen Seite des Teiches
Del otro lado del charco
Por: Sophia Gaitán*
(Deutsche Fassung siehe unten)
El periodo presidencial 2016-2021 lleva cuatro presidentes y ha sido caracterizado por un juego de poder constante entre el Legislativo y el Ejecutivo. Tras la renuncia del Presidente Electo Pedro Pablo Kuczynski en consecuencia de la presión política del Congreso, Martín Vizcarra – su vicepresidente – asumió la Presidencia Constitucional en el 2018.
Vizcarra, un presidente sin partido, fue vacado por el Congreso dos años y medio después de su posesión, y a tan solo cinco meses de las elecciones presidenciales, a través de una votación con una mayoría absoluta de 105 votos sobre 130 parlamentarios. ¿La razón? Incapacidad moral. Así es como asume Manuel Merino, en ese entonces presidente del Congreso, la Presidencia del Perú. La interpretación del artículo de la Constitución en el que se estipula las condiciones bajo las cuales un presidente puede ser vacado, fue acomodada a los intereses del parlamento. Así, perpetuando lo que el pueblo reconoce como una vacío de poder anticonstitucional. Y en consecuencia, el poder ha sido asumido por un integrante del Legislativo, un golpe de estado.
La última semana ha tenido un peso importante en la política e historia peruana. La llamada Generación Bicentenario ha liderado marchas alrededor de todo el país, que han sido consideradas las más grandes en nuestra historia. La población alzó su voz en contra del corrupto juego político liderado por el Congreso. Muchos medios oficiales informaron sobre estas marchas como desaprobatorias hacia la vacancia, otros medios peruanos sólo mostraban el caos producido por las protestas y algunos otros decidieron al principio no cubrir la crisis política. La verdad es que la indignación no nace en defensa del ahora expresidente Vizcarra, sino en defensa de la democracia y en desapruebo de las mafias del Congreso. Los motivos para marchar en los cinco días que duró la Presidencia de Manuel Merino incrementaban día a día. La indignación movió a casi el 40% de la población peruana a protestar activamente.
Es difícil ver como tu país se viene abajo estando tan lejos. En Alemania, al igual que en Perú, nuestras fuentes de información confiables se volvieron las redes sociales. Era despertar y ver tu Instagram lleno de sangre por toda la violencia ejercida durante las protestas. Fue despertar el 15 de noviembre con la noticia de que habían más de 40 desaparecidos y dos muertos en manos de la policía confirmados.
Estamos lejos, pero no hacer nada al respecto nunca fue una opción. La necesidad de informar y crear debate en el extranjero fue gran parte del trabajo de los residentes en el exterior. Informarnos sobre cada novedad se volvió un deber. ¿Cómo se puede ayudar estando al otro lado del charco? Alrededor del mundo peruanos y peruanas se juntaron a protestar. En Frankfurt se organizó una protesta frente al Consulado de Perú, en la cual se redactó y firmó un documento expresando nuestra inconformidad frente al golpe de estado y nuestras demandas. Dicho documento fue entregado al Cónsul para ser enviado a la Cancillería en Lima. Por otro lado, en Berlín se organizaron un grupo de peruanos y peruanas para recolectar dinero y ayudar a familias de protestantes heridos por la violencia policial. Todos y todas compartían las actualizaciones y la información relevante o de ayuda por todas las plataformas posibles. Era nuestro granito de arena en la lucha.
Estar en el extranjero es, además, presenciar cómo medios internacionales o locales del país residente no le están dando la cobertura necesaria a una crisis política de tal magnitud. En Alemania los medios importantes se demoraron días en informar de la crisis, y cuando lo hicieron, lo hicieron mal. Tagesschau, por ejemplo, redactó un artículo mediocre que incluía errores en la información dada. Tras días de exigirles un artículo decente con información verídica en la sección de comentarios y una queja oficial enviada, Tagesschau publicó un artículo mejor elaborado. Los medios se han vuelto un arma muy poderosa y es nuestra obligación exigir el correcto uso de ellos.
Hoy Perú tiene un nuevo presidente para la etapa de transición hasta las Elecciones Presidenciales. Sin embargo, aún tenemos mucho por lo cual luchar. El Perú despertó, ha comenzado una época de politización que no puede parar. La información y la memoria son vitales para este proceso. No nos volvamos a dormir.
*Estudiante peruana en Alemania
*Las opiniones aquí presentadas no representan necesariamente la posición de la iniciativa.
Auf der anderen Seite des Teiches
Von: Sophia Gaitán*
In der Präsidentschaftsperiode 2016-2021 gab es vier Präsidenten und ein ständiges Machtspiel zwischen der Legislative und der Exekutive. Nach dem Rücktritt des designierten Präsidenten Pedro Pablo Kuczynski aufgrund des politischen Drucks des Kongresses übernahm sein Vizepräsident Martin Vizcarra 2018 das Präsidentenamt.
Vizcarra, ein Präsident ohne Partei, wurde zweieinhalb Jahre nach seiner Amtseinführung und nur fünf Monate vor den Präsidentschaftswahlen vom Kongress mit einer absoluten Mehrheit von 105 Stimmen von 130 Parlamentariern abgesetzt. Der Grund? Moralische Unfähigkeit. Auf diese Weise übernimmt Manuel Merino, der damalige Präsident des Kongresses, die Präsidentschaft von Peru. Die Auslegung des Verfassungsartikels, der die Bedingungen festlegt, unter denen ein Präsident abgesetzt werden kann, wurde den Interessen des Parlaments angepasst. Dadurch entstand ein Machtvakuum, dass vom Volk als verfassungswidrig gesehen werden sollte. Deshalb übernahm ein Mitglied der Legislative die Macht. Dies führte zu dem Staatsstreich.
Die letzte Woche war wichtig für die peruanische Politik und Geschichte. Die so genannte Zweihundertjahre-Jubiläumsgeneration hat Märsche durch das Land geführt, die als die Größten in unserer Geschichte gelten. Die Bevölkerung erhob ihre Stimme gegen das korrupte politische Spiel unter Führung des Kongresses.
Viele offizielle Medien berichteten über Missbilligung des Staatstreiches in Form der Märsche. Andere peruanische Medien zeigten nur das Chaos, das durch die Proteste entstand und einige andere beschlossen anfangs nicht über die politische Krise zu berichten. Die Wahrheit ist, dass die Empörung nicht zur Verteidigung des nunmehrigen Ex-Präsidenten Vizcarra entstand, sondern zur Verteidigung der Demokratie und zur Missbilligung der Kongressmafia. Die Gründe gegen die fünf Tage-Präsidentschaft von Manuel Merino zu marschieren, nahmen von Tag zu Tag zu. Die Entrüstung bewegte fast 40% der peruanischen Bevölkerung zu aktivem Protest.
Es ist schwer zu sehen, dass das eigene Heimatland so weit entfernt zerfällt. In Deutschland, wie auch in Peru, wurden unsere zuverlässigen Informationsquellen die sozialen Netzwerke. Man wachte auf und sah das der Instagramfeed mit Gewalt und Blut der Proteste gefüllt war. Man erwachte am 15. November mit der Nachricht, dass mehr als 40 Personen vermisst werden und zwei Demonstranten durch die Polizei getötet wurden.
Wir sind weit weg, aber nichts dagegen zu unternehmen, war nie eine Option. Ein großer Teil der im Ausland lebenden Peruaner empfand es für notwendig im Ausland zu informieren und Debatten anzuregen. Es wurde zur Pflicht für uns, in dem unzufriedenheit über jede neue Entwicklung zu informieren. Wie können Sie helfen, wenn Sie auf der anderen Seite des Teiches sind? Auf der ganzen Welt versammelten sich Peruaner zum Protest. In Frankfurt wurde ein Protest vor dem peruanischen Konsulat organisiert, bei dem ein Dokument geschrieben und unterzeichnet wurde, in dem unsere Unzufriedenheit über den Staatsstreich und unsere Forderungen zum Ausdruck gebracht wurden. Dieses Dokument wurde dem Konsul zur Weiterleitung an die Kanzlei in Lima übergeben. Es organisierte sich eine Gruppe von Peruanern in Berlin, um Geld zu sammeln und den Familien der durch Polizeigewalt verletzten Demonstranten zu helfen. Alle teilten Updates und relevante oder hilfreiche Informationen über alle möglichen Plattformen hinweg. Es war unsere kleine Rolle in diesem Kampf.
Im Ausland ist man auch Zeuge, wie die internationalen oder lokalen Medien des Landes, in dem man ansässig ist, einer politischen Krise dieses Ausmaßes nicht die nötige Aufmerksamkeit schenken. In Deutschland brauchten die Mainstream-Medien Tage, um über die Krise zu berichten und wenn sie es taten, dann schlecht. Die Tagesschau zum Beispiel schrieb einen mittelmäßigen Artikel, der Fehler in den gegebenen Informationen enthielt. Erst nachdem eine offizielle Beschwerde eingereicht wurde und ein Artikel mit wahrheitsgemäßen Angaben im Kommentarteil gefordert wurde, änderte sich die Berichterstattung. Die Medien sind zu einer sehr mächtigen Waffe geworden, und es ist unsere Pflicht, ihren richtigen Einsatz zu fordern.
Heute hat Peru einen neuen Präsidenten für die Übergangsphase bis zu den Präsidentschaftswahlen. Aber wir haben noch viel zu erkämpfen. Peru ist aufgewacht; es hat eine Ära der Politisierung begonnen, die nicht aufgehalten werden kann. Information und Gedächtnis sind für diesen Prozess von entscheidender Bedeutung. Lassen Sie uns nicht wieder einschlafen.
*Peruanische Studentin in Deutschland
*Die hier dargestellten Meinungen stellen nicht notwendigerweise die Position der Initiative dar.